jueves, 5 de junio de 2014

Mil disculpas y una rosquilla

Que vergüenza!!! Abrir un blog y dejarlo temporalmente KO, la verdad que entre que, sin saber porqué, se borró la última entrada, más tarde entre cursos, reuniones, vacaciones y demás pues no he podido dedicarle el tiempo que se merece.
Pero las historias graciosas siguen sucediendo, las situaciones incomodas e incluso algo violentas también. También se viven momentos tiernos. Y muchos momentos de estrés.

Como no voy a retomar este blog con historias chungas os voy a contar una graciosa/tierna.

Tenemos un paciente con el que hay un acuerdo tácito en el que él nos suministra rosquillas (adiós operación bikini) y nosotros le sobornamos con chupa-chups, por cierto que llevaba un tiempo sin tener caramelos y creo que ha habido más quejas sobre eso que cuando estaba el euro por receta, bueno pues eso que este señor todos los días aparece con nuestro desayuno pero es que más tarde vuelve a aparecer con un par de periódicos. No uno no es para mi, yo todavía no he alcanzado ese nivel. De hecho, nos trae el dulce porque está mi compañera, que la semana pasada estaba ella de vacaciones y en cuanto se enteró no vi más rosquillas en lo que quedaba de semana.
Pero es que a veces llega al nivel de cantarnos a pleno pulmón coplas, incluso una vez se atrevió con una jota pero de pronto nos mira y nos dice serio: "Tengo un gargajo no puedo cantar" Nuestra cara un poema y las risas de después se oían en todo el barrio.



La verdad que es que nos cuida muy bien, aunque a mí sea de rebote :-)




Pues ya sabéis con rosquilla o sin rosquilla: Consulte con su  Farmacéutico

domingo, 3 de noviembre de 2013

Anecdotario

Estaba recordando antiguas anécdotas que me pasaron cuando empecé en este fascinante mundo y que hoy comparto algunas con vosotros.
Imagina  que te piden algo para pegar la dentadura y le sacas un adhesivo de prótesis, y otro y otro y te va diciendo a todos que no y entonces, cuando ya estas desesperada, te saca de un pañuelo la dentadura hecha trizas y es que lo que quiere es pegamento para volver a juntar los dientes porque se le cayó y la pisó. Espeluznante.

Otra de las anécdotas que recuerdo es la de estar tranquilamente en la farmacia y querer ir a avisar al jefe al despacho de que hay un representante y encontrarte en el pasillo una mujer con las bragas bajadas y gritando: ¡Estas son las compresas que uso! Podéis imaginar que me fui corriendo... Me pregunto si seguirá allí la mujer..
 
Una señora que venia mucho a la farmacia y le gustaba hablar muchisisisisisimo (no hay manera de expresar lo que hablaba). Para poneros en situación, justo después de comer, sábado que haces 12 horas, ganas de dormir siesta más que otra cosa y llega la señora y empieza a hablarte, y sigue, y continúa y ha pasado media hora y ahí está y cuando ya llegaba a la hora me avisan de que me llaman por teléfono  y el recado es: Tu madre quiere algo sobre su medicación... Espera, ¿mi madre? Por aquel entonces mi madre no tomaba nada. Cuando cojo el teléfono es mi compañera desde el laboratorio diciendo que intentaba salvarme. Bueno pues tuve que colgar y volver con la señora porque me estaba esperando, y otra hora más, en un momento de despiste de la señora, después de atender a otro paciente, me metí dentro de la rebotica. Pues va y me dice: ¡Bueno que me voy que tengo prisa! ( ¿¿En serio??)
 
Y mi favorita, situación: entra un chico de unos 16 años y que dice que quiere un colirio llamado "agua azul" y, ¡Atención! Hace acto de presencia una compañera apareciendo sentada en la silla de oficina diciendo "agua más colorante igual a agua azul" y desaparece. Si mi cara ya era un poema imaginaros la del chico,  con deciros que le propuse llamar a su casa (en aquel momento no todos tenían móvil, Ay! que antigua soy) y me dijo que no se acordaba del número, supongo que para huir lo antes posible... no volvió, que raro...





Hay algunas historias más pero esas las dejo para más adelante.

Recordad: Consulte a su Farmacéutico.

miércoles, 30 de octubre de 2013

Esas bolsas!

Hace unos días llega una pareja a la Farmacia, se colocan en el mostrador y al segundo entra un señor, al que llamaremos Sr. X, y se pone con ellos. La pareja hace su consulta y el Sr. X ahí dando su opinión, de tal forma que en un momento de la conversación le dice a mi compañera: ¡PUES TU TAMBIÉN TIENES BOLSAS EN LOS OJOS! Y eso que eres joven....
Mi compañera, siempre tan correcta ella, sonríe y dice: "Si, puede ser, jeje" Aunque yo puedo imaginarme lo que estaría pensando...Vamos lo que pensaría cualquier mujer... ¡Qué osadía! ¡Nosotras siempre estamos perfectas!

Bueno pues sigo, en eso que salgo para atender a otro paciente que había entrado y para sorpresa de todos salta el Sr. X que le toca a él. La sorpresa de todos menos de la pareja ya que resulta que ellos no conocían de nada al Sr. X, y estuvieron ahí, aguantando estoicamente las opiniones e interrupciones del Sr. X. Cada día me doy más cuenta que hay gente que no respeta el espacio vital del resto, uff, eso si cuando les toca a ellos que nadie se meta.

Bueno pues me dispongo a atender al Sr. X y para sorpresa mía me por como escribo el DNI llega a la conclusión de que vivo con mis padres (ojalá pensé yo), imaginaros mi cara de Ein????... Llevo varios días pensando en ello y aún no entiendo la relación con escritura-vivircontuspadres. 

Si vosotros llegáis a la conclusión pues ya sabéis, me la explicáis.







Al menos cuando se marchó le dijo a mi compañera: Hasta luego MAJA!



No seáis tan "malos" con nosotros anda! y seguid así: Consultando a vuestro Farmacéutico.


martes, 29 de octubre de 2013

Una de leyes

Hoy voy a ponerme un poco seria, sí, porque aunque algunos no lo crean hay leyes que regulan el servicio farmáceutico, en el que se vela por la salud pública, sí, también por la salud de esa persona que nos llega a tratar mal por cumplirlas.
Una de las funciones de las Oficinas de Farmacia es garantizar las condiciones de almacenamiento, conservación y dispensación de los productos sanitarios. Por lo que, en el momento que un medicamento es dispensado, correctamente, y sale de la farmacia es imposible garantizar la integridad del producto. Con lo cual no se puede recibir la devolución de medicamentos, siempre que hayan sido correctamente dispensados.

Todo esto se recoge en la Ley 29/2006, de 26 de julio, de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios (BOE nº 178, de 27 de julio de 2006)

Seamos sinceros, ¿Usted compraría un medicamento que puede ser que haya estado todo un día en un coche al sol, o en el armario de una cocina, o metido en un cuarto de baño donde ha pasado por cambios de temperatura? Porque yo no. Es más como profesional no me atrevo a arriesgarme a que el producto haya estado en malas condiciones y pueda generar un problema mayor de salud a otras personas.

Por lo que si alguien decide, por su cuenta y voluntad, no utilizar el medicamento, por mucho que no esté abierto el medicamento, ni usado, no se puede devolver. No es que no queramos, es que si queremos dar un servicio de calidad y velar por la salud de toda la comunidad es nuestro deber dispensar productos que podemos confirmar que han seguido una cadena de custodia, que hemos tenido almacenados correctamente y que han estado conservados a temperaturas controladas.

Pero esta claro que cada uno vela por su propio interés, que a usted le duele el dinero que "ha perdido" y yo velo porque el día de mañana no compre un medicamento que ha estado rondando de casa en casa.


Siempre consulte a su Farmacéutico.

lunes, 21 de octubre de 2013

Más escaparates


Qué alegría cuando la gente nos felicita por los escaparates que hacemos y que están deseando ver el siguiente.

Aunque siempre está la despistada. Mirad que escaparate más llamativo para la degustación de unas infusiones pues... llega una señora y me pregunta que si le doy cita para esos días para mirarle el colesterol y la glucosa, yo me quedé con cara de eh? y miré el escaparate y la intento sacar de su error y me contesta que: ah! es que claro como teneis debajo la pegatina de que mirais eso pues pensaba que era para eso. Si, es esa pegatina  que esta abajo a la derecha, medio olvidada ahí. Pero bueno ahora la señora se va con doble información que tenemos degustación y que cuando quiera puede venir a mirarse, gratuitamente, el colesterol y la glucosa.


  
 



Y ya que estamos os muestro nuestra último escaparate, con un toque moderno de Halloween, ¿Qué os parece? Este año estamos preparados que el año pasado unos niños nos amenazaron con un huevo crudo (o eso espero) si no les dabamos caramelos. 
Como aprenden los niños de rápido, en mi época no había Halloween, ¡Qué modernos nos hemos vuelto!



Sea la fiesta que sea: Consulte con su Farmacéutico



 

domingo, 20 de octubre de 2013

Esa tos!

Ya era hora de que volviera y es que entre reuniones y vacaciones (¿Por qué se terminan? ¿POR QUÉ?) tengo esto abandonadísimo.

Hoy hablaremos de la tos, pero ¡Qué complicada una consulta por tos! Una consulta por una tos puede generar colas inmensas. ¿Y eso por qué? pues porque es como si estuvieras en ¿Quién quiere ser millonario? y tu fueras Carlos Sobera, vamos a ponernos en situación:

Pregunta: ¿Qué tipo de tos tiene?

Aquí la mayoría pensaríais que sólo hay dos repuestas válidas, JA!

Respuestas:

         a) Seca/perruna.
         b) Productiva.
         c) Es seca con flemas.
         d) Es de perro pero con moco.
         e) Es seca... tose y es productiva.
         f) Así.... te tose en la cara.

Llega un momento de la conversación en la que te dan ganas de decirle "pida el comodín del público" Están los que te dicen que es tos seca pero que tienen algo de moco, entonces le dices no es seca y ahí entramos en un bucle infinito en el que va cambiando de tipo de tos por segundos, ahora sí tiene moco, pero luego no y ahora otra vez sí.
Al final consigues averiguar que tipo de tos tiene y le das un jarabe para ello pero a veces es tan complicado que menos mal que hay algún jarabe que vale para los dos tipos y sabes que le aliviará.

Aunque siempre está el que te dice que tiene moco en el pecho pero que quiere un jarabe para la tos seca, y aunque intentes explicarle que eso es peor, que la tos es porque tiene ese moco no hay manera de que entre en razón.
También está el que va probando todos y cada uno de los jarabes y aunque le digas que lo que tiene que hacer es ir al médico le da igual, ¡Otro chupito más de jarabe! ¡Qué no vea yo ese vasito dosificador vacío!
Y si ya viene alguien para comprar el jarabe para otra persona eso ya es una fiesta.




Ay! el sábado nos pidieron unas medias de comprensión (y no compresión) normal y yo me imagino a la mujer hablando con las medias diciéndoles: "Vosotras si que me comprendéis" (chascarrillo malo)




Pues ya sabéis, sea como sea vuestra tos, intentaremos averiguarlo por eso, siempre : Consulte con su Farmacéutico.








jueves, 19 de septiembre de 2013

Las Recetas Caducan

Las recetas caducan, si, así es. Ya sé que puede producir un shock inicial saber que después de un mes desde que han recetado un tratamiento, ya no vale esa receta, pero por algún motivo solo tienen 10 días de validez.

A toda la gente que se pone violenta, nos insulta, pega puñetazos al mostrador... porque le ha caducado la receta, ya sea por un día o por una semana, porque se fue de vacaciones, porque no se fijó en la fecha... por lo que sea, debo decirles que no se pueden dispensar, que lleve 32 años yendo a la misma farmacia, no le da derecho a tratarme mal, el sistema cambia, el soporte informático ha cambiado, Sanidad da unas órdenes y hay que cumplirlas. Así que agradecería que nos escucharan, que intentaran razonar, y que sopese las soluciones que le puedo ofrecer, porque somos conscientes del trastorno que pueda ocasionar.

Todo esto va porque el otro día llega un paciente y nos da una receta caducada, mi compañera, amablemente, le explica lo que sucede, sin más el hombre coge pega un manotazo en el cristal mientras agarra la receta gritando a pleno pulmón que si él se ha ido de vacaciones no tiene la culpa de que le caducara la receta, ¿Quizá la tenemos nosotros? Siguió gritando que no teníamos consideración con el enfermo, que se iba a ir a otra y veríamos como se la daban, (evidentemente no volvió). Mirad como fue la situación que estaba tomando la tensión a una señora y le empezó a subir.

Intenté razonar con él, pero fue imposible. Esta persona, ya conocida por nosotros, es una persona que normalmente es conflictiva, pero nunca hasta ese punto de agresividad.

Y sí, los antibióticos y psicótropos siempre necesitan receta.





Así que aunque te caduquen las recetas: Consulte siempre a su Farmacéutico.