Que vergüenza!!! Abrir un blog y dejarlo temporalmente KO, la verdad que entre que, sin saber porqué, se borró la última entrada, más tarde entre cursos, reuniones, vacaciones y demás pues no he podido dedicarle el tiempo que se merece.
Pero las historias graciosas siguen sucediendo, las situaciones incomodas e incluso algo violentas también. También se viven momentos tiernos. Y muchos momentos de estrés.
Como no voy a retomar este blog con historias chungas os voy a contar una graciosa/tierna.
Tenemos un paciente con el que hay un acuerdo tácito en el que él nos suministra rosquillas (adiós operación bikini) y nosotros le sobornamos con chupa-chups, por cierto que llevaba un tiempo sin tener caramelos y creo que ha habido más quejas sobre eso que cuando estaba el euro por receta, bueno pues eso que este señor todos los días aparece con nuestro desayuno pero es que más tarde vuelve a aparecer con un par de periódicos. No uno no es para mi, yo todavía no he alcanzado ese nivel. De hecho, nos trae el dulce porque está mi compañera, que la semana pasada estaba ella de vacaciones y en cuanto se enteró no vi más rosquillas en lo que quedaba de semana.
Pero es que a veces llega al nivel de cantarnos a pleno pulmón coplas, incluso una vez se atrevió con una jota pero de pronto nos mira y nos dice serio: "Tengo un gargajo no puedo cantar" Nuestra cara un poema y las risas de después se oían en todo el barrio.
La verdad que es que nos cuida muy bien, aunque a mí sea de rebote :-)
Pues ya sabéis con rosquilla o sin rosquilla: Consulte con su Farmacéutico